jueves, 9 de junio de 2011


APUNTES PARA UN POEMA NECESARIAMENTE CLANDESTINO…

Sí. Sí me aterra no saberme,
(si me transfundo y me circulo en sus ojos)
no ser yo, ni contestar ni responder a ese
nombre (impuesto, tantas veces impuesto) con el que
antes rubricaba los propósitos de enmienda.

Les quiero hacer creer que es mi drama…
que de veras lloro, que peno de veras…
pero sonrío (estúpido, ebrio de noches),
ocultando un as en la manga, un naipe secreto
(como un espejito de viaje; omnipresente)
que aplasta la jugada y desvela el secreto:

Yo soy; soy yo siempre y, sí… sí me aterra.