“Abre la puerta, niña... y deja paso al amor...”
Bien saben los que siguen este blog que sólo de cuando en cuando me permito dar autobombo en él a las formaciones musicales en las que participo; una de ellas, y la principal en cuanto a tiempo, ensayo, dedicación en definitiva, es “SIN RENCOR”, un noble y digno intento-y-logro de reavivar la llama del rock andaluz, y grupo en el que pronto cumpliré tres años. De hecho, cada día me voy acostumbrando, en un alarde de modestia patológica, a decir que “toco el bajo” en lugar de decir “soy bajista”. Porque ni soy bajista, ni creo que llegue a serlo por mucho empeño que le ponga…
Pues bien, esta noche me ha pasado algo muy curioso: presa del insomnio me he levantado para distraerme un poco en la red y pillar algo de sueño, y he comprobado que Antonio, el buen Antonio, batería y cuasi-mánager, ha colgado en Youtube nuestra particular versión de “Abre la Puerta”, tema con el que intentamos cerrar (no lo conseguimos, aún tuvimos que hacer dos o tres bises más…) nuestro ya segundo concierto anual de “Tributo a Triana” en la Sala Akasha de Marchena, a finales de abril.
Estamos muy acostumbrados a vernos en la pantalla, y es que tenemos la sana costumbre de revisionar todos juntos los conciertos que grabamos o nos graban para detectar fallos o cosas a mejorar de cara a la puesta en escena… pero nunca me había EMOCIONADO tanto como ahora al vernos y escucharnos. Y me explico.
Marchena ha sido siempre un punto de referencia en Andalucía para este estilo musical en concreto. Desde “Kiko Veneno” hasta el malogrado “Silvio”, pasando por los propios “Triana” o “Alameda” todos han demostrado su cariño por este municipio sevillano y su preferencia por tocar allí. Llevamos ya dos años (y el tercero ya apalabrado) comprobando en nuestras carnes el por qué: Marchena y su público (público de TODAS LAS EDADES) conectan inmediatamente con el músico, y de una forma respetuosa pero dinámica y vibrante llevan en volandas esos acordes tan nuestros, convirtiéndolos en atemporales, poniéndolos una y otra vez en el candelero y en la palestra. Te hacen sentirte como en casa, aunque estés a cientos de kilómetros de ella en realidad. Uno, en definitiva, siempre quiere volver allí.
He sido el primero en comentar en el propio vídeo, con un sincero “No recordaba que hubiera salido-sonado-vibrado-sentido tan, tan, tan rematadamente bien, joder!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Es un ORGULLO tocar con vosotros...”.
En resumen, compartir estos dos vídeos (puto Youtube y su restricción de diez minutos…) como una manera de agradecer a Marchena y a “Akasha” estos momentos, y como sentido reconocimiento a los artistazos, ellos sí, que comparten esos ratos (Rubén, Antonio, Platero, Juanma y Miguel).
PD rara por inhabitual: En una de las muchas crónicas que han salido de ese concierto en los medios, alguien, osadamente, llega a decir que el grupito de los vídeos de arriba es “actualmente, y en el panorama nacional, el mejor grupo que versiona a Triana, al menos que se sepa y conozca…”. Yo, y de verdad, no creo que sea para tanto, pero… los ríos que suenan no suelen ir secos… ¿no?