domingo, 19 de abril de 2009


AÑORANDO LÁGRIMAS NEGRAS

ESCRIBIR sobre el amor es demasiado difícil… el amor se VIVE.

¿Acaso el desamor no se vive? Entonces, ¿por qué resulta tan dolorosamente fácil reflejarlo en palabras, en versos, en estrofas, en libros enteros? Si el desamor se sufre y se vive, vivir en desamor es latir sufriendo. Pero no es menos vida la del que pena.
Quien busca no es culpable de no hallar.

Quien dilata las pupilas y bracea, manteniendo la fe en tocar, no puede llevar la carga de cien años de fracasos, de un siglo de oscuridad.
Quien visita las tinieblas a su antojo y a conciencia sabe, como pocos, que si no se reside de cuando en cuando en la noche, la luz de los risueños acaba cegando…

¿Y quién puede afirmar, sin el temor a jurar en vano, que el desamor es una vela sin llama, una bombilla sin filamento?
¿Quién puede apostar su honor, sin miedo a mancillarlo, a cambio de un reflejo amoroso… quién sabe si efímero?

El brillo del labio enmarcado en la sombra de tus ojos. De ello. Por ello escribo.
Tu candil intermitente en las negruras de mi cama. Con ello. Por ello existo.


PD: Como "contestación" a la nota de mi adorada L.G.L. en Facebook... Made in "The Cave", 2006.