Crónica de una disolución anunciada...

Y es que por mucho que a muchos les cueste entender el concepto, UBI SUNT no era un “grupo”, sino un “proyecto”, creado expresamente para dar un único concierto en un lugar y en unas circunstancias muy determinadas. Ese día era el 23 de noviembre; el lugar era el Café Pub Bolero; y las circunstancias tal vez debieran de haber sido otras. Tal vez.

Empezaré, en lugar de terminar, por los agradecimientos.

Los que se caen por su propio peso, por evidentes:

A “Sin Rencor”, nuestro otro grupo (ahora sin comillas) por facilitar todo el “backline” que a nosotros, humildes musiquitos, nos faltaba. Por asistir y por grabarlo en video, por supuesto, también.

A “Loki” (cómo mola tener amigos fotógrafos; y buenos, además. Las fotos de este post son suyas), que llegó a tiempo y que fue todo un profesional, haciendo más de 400 disparos desde que llegamos al local hasta que apagamos la mesa de mezclas.

A Juanle, Dani y Esther, el alma de “Bolero”, siempre apoyando incondicionalmente todas las iniciativas artísticas y culturales que surgen en el pueblo (pronto acogerán la primera exposición de Loki también).

Billy y los “Fraguel” colaboraron con la electro-acústica y parte de la percusión respectivamente. La generosidad siempre es su mejor nota definitoria.

Los “ex Protegidos” no faltaron. Pérez se “quedó con su gente” hasta el final. Sólo recordar la frase me eriza los vellos de nuevo, amigo...

Para mí, además, fue muy especial que estuviera allí esta linda muchachita, que pudo venir desde Granada con un día de antelación sobre lo previsto:

Los que tocan:

A todas y cada una de las personas que asistieron (que fueron muchas más de las que pensábamos...) y que lo disfrutaron, cada una a su modo.

Escribía un amigo una vez que en muchos sitios te puedes encontrar a gente que bebe su licor a sorbos, haciendo ver que lo paladea y lo degusta. Pero todo es mentira. Sólo es una pose, y sólo lo hacen para aparentar un refinamiento del que realmente carecen. No les gusta lo que beben, pero es trascendental que las personas que les rodean crean que sí. Todos dirán, después, “también estaba allí, también era uno de los nuestros”.

Supongo que, salvando las distancias y con todo el momento ya digerido, podría ser una aproximación muy buena para resumir el concierto del pasado viernes.

Éste fue el track-list:

Airbag
Paranoid Android
Subterranean Homesick Alien
Exit Music (for a film)
Karma Police
No Surprises
Thinking about you
Killer Cars
Follow me around
Black Star
Nude
You and whose Army
Street Spirit (Fade Out)
Creep

Sólo éramos tres almas un poco perdidas, subidas a un escenario. No teníamos ni tenemos grandes pretensiones. Salvo una universal, supongo, que es la de encontrar un mundo un poco menos complicado. Lleno de belleza. La belleza... a veces, es casi lo único que importa.

Cuando nos bajamos, supimos que este obstáculo que nos habíamos autoimpuesto ya estaba franqueado. Ahora habrá que localizar el siguiente. Mientras tanto, nos impulsa y nos motiva que alguien vuelva a hacerse la pregunta... “Ubi sunt?”. ¿Dónde están?

PD: Immerse your soul in love (please...).